Ingredientes (4 personas)
- 750gr. patatas.
- 1 sepia grande.
- 1 cebolla.
- 1 pimiento verde fino.
- 2 tomates maduros.
- 2 ajos.
- 1 hoja de laurel.
- ½ cucharadita de pimentón.
Preparación
Primero lavamos bien la sepia, la secamos con un papel absorbente y quitamos la telilla que la recubre (esto ayuda a que no se quede tan dura al cocinarla). La cortamos en dados de unos 2×2 cm. y reservamos.
En segundo lugar, picamos la cebolla, el ajo y el pimiento en trocitos pequeñitos y rallamos los tomates. Reservamos también.
Ponemos en una cazuela un poco de aceite y sofreímos la sepia hasta que coja un color blanquecino. A continuación añadimos la cebolla, el ajo y el pimiento y sofreímos a fuego medio durante 10 minutos removiendo varias veces para que no se pegue.
Mientras tanto, pelamos las patatas y las cortamos en dados medianos de tal forma que chasquen al cortarlas (esto ayuda a que el caldo del guiso se espese).
Pasado el tiempo, añadimos a la cazuela los tomates rayados, la hoja de laurel y el pimentón. Sofreímos 5 minutos y añadimos las patatas, removemos bien todo y echamos agua caliente hasta cubrir el guiso (unos 750ml) y llevamos a ebullición. En este momento lo probamos, añadimos sal al gusto y dejamos durante 20 minutos a fuego medio. Pasado el tiempo, vemos si las patatas están ya blanditas y la sepia en su punto. Si vemos que ha quedado demasiado caldoso, sacamos tres o cuatro trozos de patata a un plato, los aplastamos con un tenedor y los volvemos a añadir a la cazuela, con esto el guiso quedará más espeso y listo para comer.
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