Ingredientes (22 galletas)
- 120 gr. mantequilla sin sal (a temperatura ambiente).
- 120 gr. azúcar moreno.
- 160 gr. harina.
- 8 gr. levadura.
- 1 cucharadita de bicarbonato.
- 50 ml de nata líquida.
- 1 huevo.
- ½ ml aroma de vainilla.
- Pepitas de chocolate.
Preparación
En primer lugar, precalentamos el horno a 180ºC en posición arriba y abajo.
Mientras tanto ponemos la mantequilla, que tendremos a temperatura ambiente, y el azúcar en un bol y lo mezclamos hasta conseguir una pasta bastante homogénea. Añadimos el huevo y removemos de nuevo. Ahora añadimos el aroma de vainilla y la nata y mezclamos bien.
En otro bol, tamizamos la harina y agregamos la levadura y el bicarbonato. Poco a poco lo añadimos a la mezcla, removiendo para que se vaya incorporando (la masa que obtenemos es bastante pegajosa).
En una bandeja ponemos una lámina de papel de horno y con una cuchara grande vamos colocando porciones de masa intentando darles una forma redondeada. Intentar dejar bastante espacio entre las galletas porque una vez en el horno se expanden bastante, nosotros por placa ponemos unas 11 unidades.
Finalmente, colocamos unas cuantas pepitas de chocolate encima de cada galleta, al gusto de cada uno.
Introducimos la placa en el horno 13 minutos y mientras tanto vamos preparando la siguiente tanda para hornear.
Pasado el tiempo, sacar las galletas que estarán aún algo blandas y colocar en una rejilla para que se enfríen.
Si no sois muy seguidores del chocolate, no dudéis en hacerlas sin pepitas por encima, quedarán deliciosas también
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